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GALERÍA DE TEXTOS

CONTAMINACIÓN POR HIDROCARBUROS Y METALES EN LA ZONA COSTERA PATAGONICA


La explotación y el transporte de petróleo son actividades muy importantes para el desarrollo económico de la sociedad industrial moderna. Sin embargo, estas actividades son generadoras de riesgos que se traducen en contaminaciones accidentales (naufragios de buques petroleros, incendios en plataformas de explotación, pérdidas de hidrocarburos, etc.) o crónicas (operaciones de carga y descarga, deslastre, lavado de sentinas, mantenimiento defectuoso, etc.), que afectan directamente al ecosistema marino y costero, en particular. Si bien menos espectacular que los accidentes, la contaminación crónica es nefasta porque su incidencia sobre organismos marinos se produce por exposición permanente a pequeñas cantidades (dosis subletales). Esto genera cambios en la composición de poblaciones y comunidades; este efecto es mucho más difícil de evaluar que el de la contaminación aguda.

Actualmente existen sobre la- costa Argentina: boyas de carga y descarga de hidrocarburos, plataformas de explotación off-shore, un activo transporte de petróleo entre los puertos patagónicos (Punta Loyola, Caleta Olivia, Caleta Córdova) y los del norte (Bahía Blanca, La Plata y Buenos Aires). Por otra parte la actividad pesquera con barcos costeros, de media altura y de altura, y un tráfico de buques de ultramar y de cabote, generan una cantidad de residuos de hidrocarburos que muchas veces terminan sobre la costa afectando colonias de aves y apostaderos de mamíferos marinos.

Algunos metales pesados (entre ellos Mercurio, Cadmio y Plomo) están considerados como 1os contaminantes más peligrosos que existen. Otros, como Cobre y Zinc, si bien esenciales para 1os organismos vivos, también resultan tóxicos cuando se superan ciertas concentraciones umbrales.

Cuando estos elementos ingresan en el medio acuático, pueden permanecer en el agua, adsorberse al sedimento o fijarse biológicamente en los organismos. En efecto, muchos organismos marinos son capaces de concentrar metales, algunos de los cuales compiten con aquellos esenciales para el crecimiento y pueden acumularse a lo largo de la cadena alimentaría.

La actividad extractiva de minerales en la zona patagónica es escasa. Puede destacarse, sin embargo, la carga de mineral de hierro (ahora detenida) en la localidad de Punta Colorada (Provincia de Río Negro); la carga por Puerto Madryn de Zinc y Cobre, conteniendo además Cadmio, Plomo Oro y Plata, (hasta 1992); la descarga de minerales de alúmina, brea y coque por el mismo puerto, y la carga de mineral de carbón en Río Gallegos (Provincia de Santa Cruz).La información previa sobre estos contaminantes en la zona patagónica se ha restringido a áreas específicas de la costa.

Los hidrocarburos derivados del petróleo muestran su concentración más elevada en las estaciones de carga de los buques petroleros y se ha observado que la tendencia de acuerdo a datos anteriores, al menos en Caleta Córdova, es a aumentar. En general los puertos presentan concentraciones de hidrocarburos mayores que las zonas adyacentes, relacionadas con la actividad portuaria. Sin embargo, el impacto de estos contaminantes no se circunscribe solamente a las zonas de carga y a puertos patagónicos, sino que en zonas aisladas como en Faro Aristizábal, se han encontrado concentraciones elevadas. El origen podría ser los derrames que se producen en zonas de carga o el alije (traspaso de hidrocarburos de un buque de gran porte a otro de menor) de los buques petroleros y que son transportados por los vientos y las corrientes marinas. Las concentraciones más elevadas de metales pesados se han observado principalmente en la bahía de San Antonio (Golfo San Matías) con valores entre 1 y 3 órdenes de magnitud superior al resto de la costa. Su origen podría estar en los depósitos de ganga provenientes de la actividad minera.

Se realizaron estudios en las siguientes localidades a lo largo de la costa
Punta Loyola
Punta Quilla
Puerto San Julián
Puerto Deseado
Caleta Olivia (Golfo San Jorge)
Rada Tilly ( Golfo San Jorge)
Comodoro Rivadavia (Golfo San Jorge)
Caleta Córdova (Golfo San Jorge)
Faro Aristizabal (Golfo San Jorge)
Bahía Camarones
Puerto Rawson (Bahía Engaño)
Puerto Madryn (Bahía Nueva, Golfo Nuevo)
Bahía San Antonio (Golfo San Matías)
Río Negro (desembocadura)
Río Colorado (desembocadura)

Desde el punto de vista de la granulometría de los sedimentos, es conocida la afinidad de los hidrocarburos con las fracciones finas; las con texturas limosas y arcillosas exhiben mayores concentraciones de hidrocarburos, mientras que las arenosas presentan valores mínimos. En la zona del Golfo San Jorge se encuentran altas concentraciones de hidrocarburos asociadas a texturas gruesas Esto sugiere la presencia de una contaminación importante.

Existen diferentes zonas de acumulación; por una parte hay lugares relacionados con la actividad petrolera (Caleta Córdova, Comodoro Rivadavia y Caleta Olivia); por otra parte, existen zonas de acumulación, relacionadas con corrientes marinas con o sin influencia directa del viento.

Los sedimentos de la zona del Golfo San Jorge están contaminados con hidrocarburos de origen antrópico (producido por el hombre). En todas las muestras de este Golfo se detectó aparte de petróleo fresco, la presencia de MCNR (mezcla compleja no resuelta) indica petróleo degradado o material orgánico degradado de múltiples fuentes. Estos datos estarían señalando un "input" constante por las operaciones conectadas con la explotación petrolera de la zona y el transporte marítimo, generando una contaminación crónica. En las otras estaciones analizadas, ubicadas más al norte, los valores fueron menores o no detectables.

En el caso de Faro Aristizábal, se presentaron concentraciones elevadas de hidrocarburos en zonas contiguas a otras con baja concentración. Esto nos está indicando la existencia de lenguas o "parches" que llegan a la costa transportadas por corrientes marinas. En base a esta información deberían existir zonas en los alrededores (costa o islas) que se encuentren tan impactadas como Faro Aristizábal.

Se observan áreas de impacto incipiente por una actividad relativamente reciente en la explotación de hidrocarburos. Cabo Vírgenes está siendo impactado por la actividad petrolera en el estrecho de Magallanes (Argentina y Chile) y en Cullén en Tierra del Fuego (Argentina). En otros casos, como Punta Quilla, no hay indicios de contaminación por hidrocarburos, a pesar de que el puerto es ampliamente utilizado por la flota que pesca en la zona económica exclusiva y fuera de ella, para abastecimiento y otras actividades. De hecho, se encuentra gran cantidad de basura sólida diseminada a lo largo de esta costa. Una posible explicación podría ser el alto caudal del río Santa Cruz y una gran amplitud de marea que dificulta la acumulación de hidrocarburos -

La diferencia notable en los valores de metales pesados entre la bahía de San Antonio y el resto de las estaciones de la costa obliga a buscar posibles explicaciones sobre el origen de la misma. Hemos observado que las máximas concentraciones se presentan en el extremo oeste del canal del puerto, en donde existe acumulación de minerales provenientes de una mina. El lixiviado de estos metales puede haberse producido a lo largo de muchos años por acción de la lluvia, de viento fuerte o de mareas extraordinarias; bajo estas condiciones el mineral puede alcanzar fácilmente el cauce del canal y el agua transportará estos minerales al interior de la bahía. El Zinc presentó además un pico de alta concentración en el puerto de San Antonio Este. Será necesario encarar un estudio puntual de esta bahía con el fin de conocer los efectos que estas concentraciones de metales pueden tener en el ecosistema.

El impacto de las ciudades como Comodoro Rivadavia, Caleta Córdova, Rawson y Puerto Madryn se manifiesta claramente por la concentración de los metales analizados. En otros puertos, como Punta Loyola, en la desembocadura de los ríos Colorado y Negro y en zonas deshabitadas corno Faro Aristizábal, los valores son bajos.

En general y con excepción de la bahía de San Antonio, la zona costera patagónica presenta valores bajos a moderados de los metales analizados.

Este reporte es un resumen del Informe Técnico realizado por la Fundación Patagonia Natural, en el marco del Plan de Manejo Integrado de la Zona Costera Patagónica, elaborado por Marta Commendatore, Mónica Gil, Miguel Harvey, Juan Carlos Colombo y José Luis Esteves.

 

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